Preservación digital: Los peligros de nuestros datos en la era digital
Durante los últimos 30 años la digitalización ha transformado radicalmente la manera en que almacenamos, compartimos y accedemos a datos y media como películas, música, videojuegos o documentación de información personal. Si bien la revolución tecnológica ha traído bastantes beneficios también presenta una serie de riesgos significativos en lo que respecta a la preservación de datos a largo plazo.
Los datos que internet nos brinda o que nosotros podemos proporcionar suelen ser almacenados en servidores que son computadoras especializadas ubicadas en centros de datos. Estos centros de datos son instalaciones físicas al rededor del mundo diseñadas para albergar estos servidores garantizando la seguridad y disponibilidad de estos datos. Muchas empresas utilizan servicios en la nube (como Amazon Web Services, Google Cloud o Microsoft Azure) que permiten almacenar datos de manera distribuida en múltiples centros mejorando la preservación y disponibilidad. Estos datos se gestionan mediante bases de datos que están protegidos con diversas medidas de seguridad y regulaciones de privacidad.
A diferencia de los documentos en papel que pueden durar siglos si estos son preservados correctamente los datos digitales son frágiles. Los dispositivos de almacenamiento como discos duros y unidades de estado sólido tienen una vida útil limitada ya que los formatos de archivo y las tecnologías de almacenamiento evolucionan rápidamente lo que puede hacer que los datos sean inaccesibles en el futuro si no se cambian a nuevos formatos y sistemas de almacenamiento.
Los medios digitales como películas, música y videojuegos requieren no solo la preservación de los archivos sino también del hardware y software necesarios para reproducirlos.
La música y películas en formatos digitales requieren mantener copias en múltiples formatos y soportes. Los archivos de audio y video deben ser migrados a nuevos formatos a medida que las tecnologías evolucionan para que así tengan accesibilidad en las tecnologías más recientes.
Los videojuegos debido a su naturaleza interactiva dependen de un hardware y software específico. La emulación es una de las principales estrategias para la preservación de videojuegos, es decir, crear programas que simulen el funcionamiento del hardware original permitiendo que los juegos se ejecuten en sistemas modernos. Pero actualmente la emulación puede ser compleja y no siempre es correcta y fidedigna al programa original.
Con el tiempo los sistemas operativos como el software y los formatos de archivo se vuelven obsoletos. Si no se toman medidas para actualizar y migrar datos a nuevos sistemas se corre el riesgo de perder información valiosa. Como documentos guardados en disquetes o en formatos de archivo antiguos pueden ser difíciles o imposibles de recuperar hoy en día sin las herramientas adecuadas.
Los errores humanos, los ataques cibernéticos, los fallos del hardware y los desastres naturales pueden llevar a la pérdida de información así mismo la falta de copias de seguridad adecuadas agrava aún más este problema, muchas organizaciones y personas no realizan copias de seguridad regulares y seguras de sus datos aumentando el riesgo de la pérdida permanente de esta información.
La digitalización nos ha brindado tanto oportunidades como desafíos y es de suma importancia ser conscientes de los peligros que implica la no preservación de datos. Adoptemos prácticas de preservación digital y fomentando una cultura de responsabilidad en nuestra gestión de la información, solo así podremos proteger nuestro patrimonio digital para las generaciones futuras.
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